Es una enfermedad crónica que provoca que las vías respiratorias se inflamen y se estrechen. Puede ser tratada pero no llegar a la curación.
Cuando se presenta un ataque de asma los músculos que rodean las vías respiratorias se tensan y el revestimiento de estas se inflama lo que provoca que se disminuya la cantidad de oxígeno que puede pasar hacia el pulmón.
La etiogenia más común del asma es:
- Alergenos
- Animales
- Polvo
- Cambios de clima
- Ejercicio
- Polen
- Resfriado
- Estrés
- Humo del tabaco
Los signos y síntomas más comunes que nos podemos encontrar en el asma son:
- Tos
- Sibilancias
- Sensación de estrechez en el pecho
- Respiraciones poco profundas y muy cortas
Esta enfermedad se diagnóstica tras un examen físico y la realización de pruebas pertinentes como pueden ser una gasometría arterial, de la función pulmonar o una radiografía de tórax.
El tratamiento se basa principalmente en dos ejes:
- Control para prevenir los ataques. Se suelen usar esteroides inhalados
- Alivio rápido durante los ataques de asma. Se usan broncodilatadores como pueden ser el Ventolin.
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